Las bibliotecas: ventanas al mundo.

domingo, 3 de marzo de 2013

LA AUTOESTIMA.

LA AUTOESTIMA.
La palabra autoestima nos habla de cuánto nos valoramos y queremos a nosotros mismos. Esto parece sencillo y podríamos pensar que todas las personas estamos a gusto con nosotras mismas, nos aceptamos y nos queremos. Sin embargo no siempre es así. No todas las personas nos sentimos satisfechas con nuestra apariencia física, con nuestro carácter, con la forma en que nos compartamos, con lo que hemos logrado en la escuela, con nuestros amigos o dentro de la familia. Estos factores determinan cómo nos sentimos con nosotros mismos, qué tan contentos estamos con ser como somos, qué tanto nos aceptamos y qué tanto nos queremos.
¿CÓMO SE DESARROLLA LA AUTOESTIMA?
Desde que somos pequeños sentimos apoyo de nuestros padres y madres, y de otras personas que nos educan y cuidan. Aprendemos a identificar este apoyo y los sentimientos que tienen hacia nosotros por la manera como se expresan de nosotros, como nos describen, por el modo en que nos demuestran su afecto. Si nos dan palabras de aliento y muestras de amor, nos sentimos contentos con nosotros mismos y con lo que hacemos. Si, en cambio, nos amenazan, dicen cosas negativas de nosotros, desconfían y enfatizan más los errores que los aciertos, nos vamos formando un concepto negativo de nosotros mismos.
También desde la infancia aprendemos a describirnos y empezamos a formarnos una idea de cómo y quiénes somos.
Conforme crecemos nos empezamos a dar cuenta de que tenemos cualidades y habilidades, y también defectos y limitaciones. Los éxitos o fracasos nos enseñan cómo somos y empezamos a sentirnos con mayor seguridad y confianza si nos piden realizar tareas en las que hemos tenido éxito, asimismo, sentimos inseguridad cuando tenemos que enfrentar retos similares a otros que nos han costado trabajo. Esta percepción de cómo somos y qué sabemos y qué podemos hacer se llama autoeficacia. En la medida en que nos sentimos con mayor autoeficacia tenemos más confianza, mayor satisfacción al realizar lo que se espera de nosotros y nos vamos a querer y a tratar de superar cada día más.
Todas las personas valemos por nosotras mismas. No es necesario ser el o la mejor. Lo importante es hacer nuestro mejor esfuerzo y sentirnos satisfechos con nuestros logros.
Tener una alta autoestima no significa ser presumidos, egoístas, sentirnos lo máximo ni ser arrogantes con otras personas. Al contrario, las personas con alta autoestima son seguras de sí mismas, pueden establecer relaciones de amistad y apoyar a los demás, no necesitan “lucirse” con otras personas. Quien se quiere a sí mismo se conoce y acepta tal como es, conoce sus cualidades y limitaciones. Es más fácil que alguien con alta autoestima se deje ayudar y reconozca sus errores que una persona con baja autoestima.

BIBLIOGRAFIA.
TRONCOSO ALFREDO, TENORIO ANTONIO (2003) “Formación Cívica y Ética”  Ed. Noriega, México, D.F.

No hay comentarios:

Publicar un comentario